Tras el artículo de Coalición Canaria hay que aclarar varios aspectos sobre el estado del proyecto y la financiación del mismo.
En relación a la información vertida por Coalición Canaria sobre la situación del proyecto de las piscinas de Quintanilla hay que aclarar varios aspectos.
Primero, el proyecto de las piscinas de Quintanilla no obra en poder del Ayuntamiento de Arucas. Se trata de un proyecto elaborado por el Cabildo de Gran Canaria, cuya Consejería de Obras Públicas e Infraestructuras era el encargado de ejecutarlo. Ante la falta de licitación y tras varias reuniones, el Ayuntamiento de Arucas ha solicitado la cesión de este proyecto para poder llevarlo a cabo desde esta administración local.
Por otro lado, el Gobierno de Canarias creó en 2021 una partida para las piscinas de Quintanilla y la ha transferido para el año 2022. En ningún caso se ha perdido dicha partida presupuestaria, ya que se mantiene la financiación de 948.457,00 €.
Una vez el Cabildo de Gran Canaria haya cedido el proyecto al Ayuntamiento de Arucas, se iniciarán los trámites oportunos para llevar a cabo su ejecución,. Primero tendrá que pasar el trámite administrativo y ser informado de su viabilidad, tanto por la Dirección General de Planificación Territorial, Transición Ecológica y Aguas del Gobierno de Canarias como por la Dirección General de Costas.
Independientemente de si este año no pudiese se ejecutado el proyecto, se mantendría la partida presupuestaria en 2023, pues, tanto el Presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, como la Consejera de Turismo, Yaiza Castilla, mantienen el compromiso para la creación de las piscinas naturales de Quintanilla.
Este grupo de Gobierno trabaja día a día por mantener todos los proyectos que mejoren las infraestructuras de nuestro municipio. Es por ello, el especial interés que se ha tenido para solicitar la cesión del proyecto elaborado por el Cabildo de Gran Canaria.
Es inaudito que a estas alturas la portavoz o presidenta de Coalición Canaria en Arucas no conozca el procedimiento administrativo de las Administraciones Públicas y no sepa distinguir entre perder un dinero o transferirse al ejercicio presupuestario siguiente, ya que, no se ha perdido ninguna partida del proyecto, sino que se ha transferido del año 2021 al 2022. Entendiendo su papel de fiscalización como miembro de la oposición, creemos que debería informarse y contrastar información a través de las fuentes de donde emanan los proyectos y financiaciones y no confundir a la ciudadanía con informaciones falsas y populistas, a no ser que ese sea su objetivo, cuestión que sería igualmente reprochable.